Jacobo Castellano. Primera individual en Madrid. Galeria Fúcares.

Sin título, 2005. Jacobo Castellano

Son varias las líneas de trabajo que el artista jienense Jacobo Castellano presenta en su primera individual en Madrid: un conjunto de piezas escultóricas, un grupo de collages y varias fotografías.

Es la escultura titulada Tiovivo, que ocupa el espacio principal de la galería, la que reúne en torno a sí buena parte del universo artístico del artista, un ejercicio de acumulación de la memoria realizado a partir de fragmentos de su ya desaparecido hogar. Con reiteradas alusiones al recuerdo de la infancia, Castellano propone en esta obra un doble juego de aceptación y negación de la experiencia lúdica en la que vierte un alto contenido narrativo a través de referencias cinematográficas o biográficas. Dotar de forma al recuerdo, hacer de la memoria un ente tangible sin caer en sentimentalismos parece ser la premisa principal del artista en esta obra, algo también visible en las imágenes del Sáhara en las que se recurre a una práctica similar. Los saharauis acumulan objetos encontrados para erigir construcciones de claro arraigo escultórico, que aparecen diseminadas en el desierto, donde cada fragmento, cada pieza de desecho superpuesta, es un trozo de biografía. Parece claro que el trabajo de Castellano se apoya en la acumulación sistemática de conceptos que trascienden la mera cuestión formal (objetual) para adentrarse en una dimensión temporal. Así, en la sala pequeña, el artista presenta un juego conceptual en el que la imagen y la noción del tiempo se entremezclan en movimientos arrítmicos que propician realidades paralelas, mientras en los collages conviven experiencias temporales diversas, con alusiones a la infancia, pero también al trauma de la enfermedad y la muerte, presentes siempre en la obra del artista, esto es, la escenificación de un tiempo ya ido.

Javier Hontoria

El Cultural.es: 10/03/2005

 

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